sábado, 29 de diciembre de 2012

Podalirio y Macaón













Bien entrado el siglo XX la mitología grecolatina se convirtió en un socorrido recurso del que de vez en cuando echaba mano el cine para sus grandes producciones. Recuerdo con la nostalgia de un niño de diez años una película de 1981 en el Cine Central de Morón: Furia de Titantes, quizás la última película de un género en declive, con efectos especiales que las nuevas tecnologías dejaron anticuados rápidamente, no hay más que ver que ese año el Oscar se lo llevó todo un clásico: Indiana Jones, en busca del arca perdida.