lunes, 24 de junio de 2013

Caballitos del diablo



Las crónicas japonesas del siglo V de nuestra era cuentan como Yuryako Tenno, vigésimo primer emperador de Japón, cazaba un día en una llanura de la actual provincia de Nara cuando fue importunado por un tábano. Al susodicho animalito no se le antojó otra cosa que hacer una degustación gratuita de sangre real, picando al emperador para satisfacer el singular capricho sin ni siquiera un sumimasen de por medio (con permiso, en japonés), lo cual es todo un ultraje en la cultura más educada del mundo. El emperador, física y mentalmente irritado, poco podía hacer para vengar tamaña afrenta una vez el insecto emprendió el vuelo, pero ese instante, una libélula descendió en picado y arremetió contra el vampiresco animal, devorándolo al instante.

martes, 11 de junio de 2013

Escólidos: las avispas del puñal


Entre los insectos más grandes de nuestro país se encuentran los denominados escarabajos longicornes, su nombre común indica a las claras su fisonomía, con unas largas antenas o “cuernos” que a veces son más largos que el propio cuerpo. Los grandes y viejos árboles son las mansiones naturales para las crías de estos animales, que se dedican a horadar su interior excavando galerías y túneles al alimentarse de la madera durante tres o cuatro años hasta que se convierten en adultos.